Y es que la "fiesta" ha sido de órdago. En apenas unas jornadas, los títulos de Oracle se han disparado cerca de un 15%, pasando de la zona de los 124 dólares a superar con creces los 140 dólares. Un movimiento brutal que tiene nombres y apellidos: Inteligencia Artificial y Cloud. Lleva un 30% de subida en los últimos 30 dias.

Google y OpenAI se rinden a Oracle

El catalizador de esta explosión bursátil ha sido la presentación de sus resultados trimestrales. Pero ojo, no tanto por las cifras en sí (que la guía para el próximo trimestre fue algo más floja de lo esperado), sino por los anuncios que las acompañaron. Y es que Larry Ellison, su fundador, se sacó dos ases de la manga:

Acuerdo con Google: La infraestructura Cloud de Oracle (OCI) estará disponible directamente en la nube de Google. Esto es un golpe sobre la mesa, un reconocimiento de un competidor directo a la potencia de la infraestructura de Oracle.

Acuerdo con OpenAI: La creadora de ChatGPT utilizará la nube de Oracle, junto con la de Microsoft Azure, para ampliar su capacidad de computación.

En definitiva: los dos mayores jugadores en el campo de la IA acaban de validar la tecnología de Oracle, que  se ha convertido en una pieza clave en el tablero de la infraestructura que necesita la IA para seguir creciendo.

Vemos la subida que ha experimentado en el último mes.

Desde el punto de vista técnico, la jugada es de manual. Como siempre decimos en nuestro libro "Cazadores de Tendencias", lo importante es saber en qué fase se encuentra un valor. Oracle llevaba meses moviéndose en un rango lateral, una fase de acumulación donde la paciencia es clave.

La publicación de resultados ha provocado un enorme hueco de escape (breakaway gap), que es una de las señales más potentes de inicio de una nueva tendencia. Estos huecos, sobre todo cuando van acompañados de un volumen de contratación masivo como ha sido el caso, indican un cambio radical en el sentimiento del mercado.

El valor ha pasado de una fase lateral directamente a una FASE III expansiva. Y, como no podía ser de otra manera, nuestros Indicadores de Fuerza y Tendencia lo reflejan a la perfección. El cambio en la puntuación es rotundo: el valor ha entrado en fase "Muy Fuerte" con una tendencia alcista a medio y largo plazo que no deja lugar a dudas. Esto es lo que buscamos: activos que demuestran fortaleza y tienen el viento a favor.

¿Y ahora qué hacemos, compramos?

Aquí es donde entra la disciplina del inversor. Como decía el gran André Kostolany, "nunca persiga nunca una acción". Después de una subida tan vertical, el riesgo de entrar en el mercado es elevado.

Lo más prudente, siguiendo nuestra metodología, es esperar a que el precio se tome un respiro. El antiguo techo, la zona de resistencia que se situaba en torno a los 128-130 dólares, se convierte ahora en el nuevo suelo, en un soporte clave. Una vuelta a esa zona sin que aumente la presión vendedora (un pullback de manual) sería la señal que muchos "cazadores de tendencias" estarían esperando para subirse  a este tren.

Descubra las carteras de fuerza y tendencia para invertir a medio y largo plazo en bolsa.